Nuestro homenaje

Esta semana el país se vistió de luto. Negro en los medios, negro en las calles, negro en los corazones. Tras una larga enfermedad, el Dr. Alfonsín terminó su lucha en esta tierra. Una lucha por la verdad, por la libertad y la dignidad no sólo de su familia y de su pueblo, sino de toda una Nación. Una lucha que hizo vida con coherencia a lo largo de 82 años.

Símbolo de la democracia, la defensa de valores como la educación y el diálogo, Raúl Ricardo Alfonsín fue una persona de otro tiempo, de esos que ya no quedan. Honesto, idealista y fiel a sus principios, se consagró un padre para algunos, un maestro para otros, un gran político para muchos y un verdadero demócrata para todos.

Por eso una multitud lo despidió como debía ser: con el protocolo reservado para los funerales de un jefe de Estado, con la bandera a media asta en todos los edificios públicos, con interminables peregrinos, flores, cánticos y carteles, con una cobertura permanente de los medios, con palabras sentidas desde oficialistas y opositores, con todo el dolor, toda la emoción y toda la gratitud.

Además de una interminable lista de condolencias llegadas de todas partes del mundo, Brasil, Perú, Uruguay y Paraguay decretaron duelo nacional en sus países. Y como si fuera poco, el 2 de abril -otrora día de la soberanía nacional- el Congreso amaneció cruzado por un arco iris en su cúpula que, si bien fue un simple fenómeno climatológico, reforzó la mística generada por la figura del ex Presidente.

Y no quisimos ser menos. El programa de hoy estuvo dedicado a la memoria de Alfonsín. Escuchá el análisis político de Antonio Vidal y El Dato de la Semana por Lucio Di Matteo.





Para Hoy y para Siempre: no dejes de escuchar el audio con las palabras del mismísimo ex presidente de la República Argentina que tanta vigencia tienen: